martes, 16 de julio de 2013

Castañeda Jose Roberto CAMACHO PRADA, gran hombre, gran Periodista, leal, valiente, aguerrido y muy honesto, eso fue este hombre, cuya imagen ven ustedes hoy a través de la red. Fue asesinado cobarde mente en la ciudad de Leticia, Capital del Amazonas. Sucedió en una época nefasta, en una época en que el Estado a través de una gran parte de sus Instituciones, hizo maridazgo y le sonreía a las criminales y despiadadas mafias del narcotráfico de aquel entonces. El crimen cometido sobre este gran Colombiano, sigue clamando Justicia y verdad. Claro no fue ni ha sido el único martir de esa organización asesina. Cayó un Procurador de la República, Un gran Ministro de Justicia, Cayó una esperanza Política real, como lo fue El Doctor Luis Carlos Galan Sarmiento, Cayó Alvaro Gómez Hurtado, y con ellos otros grandes e importantes hombres y mujeres del país; pero que tristeza, nada ha pasado, ni sus asesinos han sido apresados, ni la verdad sobre esos genocidios ha sido conocida, lo único que sé, y sin miedo lo digo, lo escribo, es que hemos vivido , y seguimos viviendo en una Nación, donde su clase Política Putrefacta, es y ha sido cómplice directa e indirecta, de todos los genocidios que hasta hoy, hasta este instante nuestra sociedad sigue viviendo. Esta Colombia de la que se hacen muchos alardes de grandeza, posee una pobreza impresionante, en valores, en respeto por la vida, y en el espíritu de solidaridad, por la defensa de los intereses del que ha sido desposeído. Roberto Camacho prada, fue un gran amigo y Profesor mío, a él, le debo mucho, a él le aprendí muchas cosas, pero las de mayor importancia para mi vida, aquellas que tienen que ver con el valor y la verguenza, esas que no permiten aún a costa de la misma vida callar, ante la presencia de la corrupción en el manejo de la cosa Pública, ni ante la presencia de los Carteles, que sembrando el terror, se adueñan del tesoro de la patria y se hacen llamar señores, como los que hasta hoy, seguimos teniendo en la Administración del Estado, en el plano Departamental, Municipal, y Nacional. Roberto Camacho Prada, fue un ciudadano ejemplar,, un gran esposo y un gran Padre de Familia, su legado esta grabado en mi corazón, porque amó las libertades, la honestidad en el manejo de las cosas que se entregan para ser administradas bajo nuestra tutela. Lo demostró con creces cuando fue, responsable directo de la Cámara de Comercio en el Amazonas. Asumió la responsabilidad, de verdadero Periodista, y no se arrodillo, ante quienes en ese momento, eran practicamente la autoridad en todos los Campos del Amazonas. Pues nadie puede desconocer la verdad, de que en esa época de Roberto Camacho en el Amazonas, quienes mandaban a todo nivel civil de esa región, eran los llamados Narcotraficantes. Por Dios que es verdad, todo estaba infiltrado y controlado por ellos. Y yo no tengo la menor duda, de que las mafias de entonces fueron las que cegaron la vida de este gran Colombiano.desde este humilde comentario, elevo mis preces al Padre Celestial, para que en su Infinita bondad, por amor al Cristo eterno, mantenga en el Cielo el alma de este gran Periodista, compatriota y gran Colombiano. A la vez, aprovecho, para enviar mi voz solidaria, con su señora esposa, sus hijos y de más seres de sangre, que sé, hasta hoy siguen añorando su presencia.

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