viernes, 28 de junio de 2013

Querido amigo Efraín Antonio Gómez S. Desde los comienzos de nuestra historia, hemos sido manejados y dirigidos por intereses extranjeros, que nos han dictado las directrices a cumplir para poder subsistir como Nación. Desde Bolivar, hasta el pésimo Presidente que tenemos hoy, han sido fieles cumplidores de lo que se le ha dado la gana imponernos el dominador del Norte. He escrito varias veces manifestando a través de mi página despierta Colombia José Castañeda que Colombia no es gobernada con directrices de índole Nacional, que aquí se hace lo que en el extranjero se ordena que hagamos. Eso puede verse y sentirse por ejemplo en el cumplimiento a cabalidad de todas y cada una de las imposiciones emanadas del Fondo Monetario Internacional. Nuestra economía es manejada con un criterio netamente Extranjero, eso no sería malo, sí esos criterios que nos exigen cumplir fuesen en favor de nuestro pueblo; lo triste de esto, es que esas directrices solo benefician a unos pocos, y despojan de todo bienestar a millones de nuestros con ciudadanos. En Colombia se legisla cumpliendo órdenes Internacionales, aquí no asemos nada a la Colombiana, porque seguramente a quienes nos gobiernan eso no les conviene, y seguramente no podrían delinquir como delinquen, pues la corrupción en casi todas las Instituciones del Estado es alarmante, y puede decirse, sin miedos, sin tapujos y con todo el valor y la convicción del Corazón, que la corrupción le ha hecho, y le sigue haciendo más daño al país y sus moradores, que todas las organizaciones criminales juntas. Ahora bien querido señor. y demás compatriotas. La Policía, ésta Institución cuya existencia a sido pagada desde sus comienzos de vida con un duro, triste, y yo diría macabro precio; pues han sido centenares de hombres y valerosas mujeres, que han ofrendado sus vidas en la defensa de la Constitución y las Leyes de la patria, y como tal, en la defensa de los moradores de la misma. Ahora bien, nosotros los llamamos enemigos del pueblo, porque ellos no se unen en la defensa de lo que nosotros nos hallamos reclamando, querido ciudadano y demás compatriotas, la Ley y la Constitución ordena a ésta gloriosa Institución mantener el orden, sin importar el precio que por ello, esta familia, llamada Policía tenga que pagar. Ellos solo cumplen órdenes, de no cumplirlas se harán acreedores a sanciones muy severas, que irán desde destitución, hasta prisión por desacato no solo a la Normatividad Jurídica , sino a la autoridad de sus Jefes Civiles, como Presidente de la Nación, Gobernadores y Alcaldes entre otros. Es la Policía un noble Cuerpo compuesto de compatriotas, que no poseen descanso ni de día, ni de noche, que no posee, ni siquiera el tiempo justo y digno, para dedicarle a sus familias. Amados Colombianos, en un 99.9 por ciento, esta digna familia a la que tanto aveces despreciamos y hasta odiamos, no quisieran tener que emplear la fuerza para reprimir momentos de mal uso de nuestras protestas, pero ellos deben hacerlo, y además no pueden permitir que bienes de personas que no tienen porque verse afectadas con nuestra protesta sean atacadas, eso nunca debería suceder. Créanme oh amados compatriotas, los caminos de la violencia y el desorden, nunca nos conducirán a alcanzar los cambios profundos, que en todas las Políticas e Instituciones esta Nación, está reclamando a gritos desde hace muchas décadas. Terminemos concluyendo y aclarando a mis amados paisanos, que no es nuestra Policía ni nuestras Fuerzas Armadas, los enemigos a ultrajar, ni a odiar, ni menos a combatir, pues ellos no son los responsables de nuestras desgracias. Ni del desempleo infame que padecemos, ni de las plagas que destruyen el desarrollo de nuestro pueblo, ni son los responsables de los interminables hilos de miseria que posee esta Nación. La responsabilidad toda debe recaer, sobre el gobierno Central y sus corrompidas y malas políticas, Igual debe recaer la responsabilidad sobre tanto gobernante Departamental, Distrital y Municipal corruptos, a los que el pueblo torpemente ha elegido. Son estos a los que debemos combatir, pero sin llegar a los caminos de la violencia y la agresión aleve, pues los caminos de la violencia solo dejarán más desolación y miseria, incluso en los mismos promovedores de la violencia. Tenemos oh Colombianos armas poderosas, mejores que una piedra, que un garrote, que una papa explosiva, mejores que una metralleta, o un asqueroso fusil. Somos los que tenemos el poder de elegir, somos el Constituyente Primario. Hagamos buen uso de estas poderosas y nobles armas, que a pesar de lo anacrónico de ésta Democracia aún las poseemos, y con ellas si nos lo proponemos podemos cambiar el rumbo de esta Nación anarquizada, y postrada a lo que quiera imponernos el país corrupto de el Norte, llamado Estados Unidos. Los invito a leer mi página despierta Colombia José Castañeda. E igual los invito a no votar en las elecciones venideras, y que si lo hacéis, lo hagáis, votando en blanco será el golpe más democrático que podamos darle a estos corrompidos y malevos gobernantes. Dios ilumine y guíe a Colombia.

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