Ironía es, que éste pueblo sea tan cínico, tan olvidadizo, tan cómplice. Apoyando a un hombre que solo es un abusador del Poder, y a su vez, un canalla, que tiene endeudada ésta patria, que tiene la educación a nivel Internacional, viviendo los índices de calidad más bajos de su historia, un gobernante que se ha olvidado de su pueblo que fue el que lo sentó sin merecerlo, donde hoy se halla. Ironía es, que ´ éste país le siga creyendo a las bestias asesinas de las Farc y el E.L.N.. Ironía, es no darse cuenta este pueblo, lo miles de millones que de su dinero gasta éste charlatán, en falsas pautas publicitarias. Ironía es que éste pueblo siga sumiso a un gobernante, que al salario mínimo, le aumentó 800 pesos diarios, mientras a cada uno de sus serviles y corruptos Senadores y Representantes, les dio una Navidad muy feliz, con venturoso año Nuevo. Entregándoles a cada uno de ellos, la no despreciable suma de 8 millones. Ironía es, que éste pueblo continúe creyendo en un pésimo Presidente, como Juan Manuel Santos, que sustrajo como le dio la gana, más de 10.000 millones de pesos del Banco Agrario, que eran para apoyar programas relacionado con el Agro, aduciendo que dicho dinero se invertiría en infraestructura, pero todo hasido solo bla, bla, bla. Ironía es que se siga creyendo en un elemento como quien nos está gobernando, cuando posee un total y pleno abandono, el sistema Carcelario y Penitenciario del país. ¿ Por qué seguir apoyando un Presidente, que solo sabe, llenar las Cárceles de la patria. de presos y presos, pero desconoce el deber y la obligación que tiene, de mantener una Política de real, y verdadera de resocialización?. Abajo este mentiroso y demagogo, abajo su falso Cesar, mediocre Jefe de debate. Fuera Santos y su acomodada negociación de paz.. NO a la reelección, esa es la consigna, de quienes realmente, en inmensa mayoría, creemos que en Santos el verdadero futuro de la patria está en peligro. Piensa muy bien, Colombia, no sea que muy pronto estés llorando y lamentando, viendo a tus hijos, o asesinados, o prisioneros, bajo las leyes opresoras y criminales, hechas y emanadas, por Ivan Marquez, Timochenko, y compañía..