DESPIERTA COLOMBIA JOSE CASTAÑEDA SE ASOMBRA DE LA DESFACHATEZ DE ESTE SEÑOR, QUE RIGE LOS DESTINOS DE LA PATRIA. ES UN SER, QUE NI SIQUIERA PIENSA PARA HABLAR. POR RED NOTICIAS, DIJO UNA BARBARIDAD, QUE ENOJÓ A LOS EX, MIEMBROS DE LA FUERZA PUBLICA, DIJO ASÍ: "No contamos con una fuerza Pública, que pueda derrotar a la guerrilla" . ¿ Será que ahora, tendrá la desfachatez, de negarlo?; ¿ será que los medios televisivos, son tan de poca dignidad, que se prestan para esconder la grabación, o se la corrigen?. Porque esto que estoy exponiendo en mi comentario, lo expresó ayer tarde, e inmediatamente, se pronunciaron los Militares retirados. Presidente, es una tristeza, y vergüenza, lo que usted, deja escapar de forma apresurada, e irresponsable, de su propia boca. Si el Comandante en Jefe, de nuestras Fuerzas Militares y de Policía, dice para el país que gobierna, y al mundo que le escucha, que no hay, una Fuerza Militar en este momento que pueda derrotar a los enemigos de la patria, responda, ¿ qué pueden estar pensando sus subalternos, y su propio pueblo?. Tal vez, si usted, señor Juan Manuel Santos, suelta tal barrabasada, en una reunión privada, junto a sus Fuerzas Armadas, no cause tanto inconformismo tal expresión: Pero hacerlo de la manera que lo hizo, ante la audiencia de millones de Colombianos, que como yo, tuvieron que haber oído lo mismo, y ante millares de oyentes del Planeta Tierra, es una irresponsabilidad, mil veces el tamaño del "CERRO DE MONSERRATE", en Bogotá. Pero además es una vil, canallada.. No tiene autoridad moral, ni Política, para exigir a sus Militares y Policías, más sacrificios, ni esfuerzos, frente a la mal llamada Guerrilla en Colombia. Usted, Presidente, con esta clase de expresiones públicas, está dejando a nuestros héroes, y a su pueblo, muy mal parados, frente a los enemigos de la libertad, los derechos humanos, y todos los principios y valores, para una real, convivencia entre los hombres. Usted, Presidente Santos, ha acabado, de darle todas las alas, a quienes yo pensé, que de verdad, quería, poner en cintura sus viles acciones frente a los más humildes de la Nación, que desgraciadamente gobierna. Usted, Presidente Santos, acaba de poner en ridículo a sus Fuerzas Armadas. Usted, anoche le entregó a esos forajidos, que negocian en la Habana, el derecho a exigir lo que les de la gana, pues saben que no tenemos un Ejercito, capaz de ganarles la guerra. Tal vez, fue, ¿ que se equivoco?, puede ser; pero una barbaridad de éstas, también señor, tiene que tener un precio Político, y es su renuncia como Presidente de los Colombianos. Pues tal barbaridad, que usted, soltó, sin medir la lengua, puede ser, causa de un vergonzoso fracaso, ya en los diálogos de Cuba, en busca de una desteñida paz, o también responsable de la perdida real, de la guerra, frente, a estos usurpadores del Derecho, la Libertad, los Valores, la Justicia, y la misma vida. Usted, anoche señor Santos, dejó en jaque, las Fuerzas del orden, en la Nación. Eso que usted ha soltado de manera irresponsable, es la causa de ese afán desmedido y vulgar, que deja entrever; su diabólico deseo, de ver su nombre escrito en las páginas de la historia, como el que logró no solo combatir desde algunos frentes a las farc, sino también, el que logró una firma de paz, así esta quede pegada con las babas, de los asesinos, las suyas, y las de quienes están sentados con esas lacras, en Cuba. Presidente Juan Manuel Santos, Si usted, continua, tan mal asesorado, y pasándose por encima de la voluntad de su pueblo, y no mide las palabras que suelta, en su afán de mostrar, que es usted, el que manda; lo único que va a lograr, es avergonzar hasta su misma casa, y demás seres amados. Pues al paso apresurado, e irresponsable, como viene manejando los asuntos más delicados del país, solo quedará su nombre inscrito en la historia de Colombia, y la mediocre Comunidad Internacional que lo apoya, En las páginas negras, y nefastas, que contarán a las generaciones venideras; que su país, no posee, desarrollo en ninguno de sus aspectos, ni Políticas, porque hubo un hombre, de nombre Juan Manuel Santos, que por desgracia, se hizo Presidente de su Nación, condenándole, no solo a hilos de miseria económica, sino a hilos de miseria moral, Política, y de libertades. Y que en su afán de gloria, dejó el país en un infierno de distintas calamidades, pero que él, también sucumbió, en el infierno, de su pésima Administración. Lo que usted, expreso públicamente, la noche anterior, si tuviese un mínimo de respeto por sus Fuerzas Armadas, y por su pueblo, presentaría la renuncia, como- "PRIMER CIUDADANO DEL PAÍS". Créame, que le haría un inmenso favor a Colombia, y seguramente, para las generaciones que vienen, dejaría, algo de imagen positiva para ellas.